Nota del Editor:
Es necesario recordar a nuestros lectores que los artículos no se
han escrito, ni mucho menos, con la intención de causar división ni
de crear antagonismo en contra de ningún grupo en concreto ni grupos
de personas. Creemos en la total y absoluta unidad de tanto los
israelitas (los judíos efraimitas) como los que no son israelitas en
el cuerpo del Mashiaj. Creemos que esta unidad debe de tener lugar en
el contexto de las verdades tanto bíblicas como históricas, por muy
doloroso que pueda ser poner de manifiesto los errores de puntos de
vista religiosos vanos ampliamente difundidos. Si se sigue
correctamente, esta unidad dará como resultado el que los
"Christians" (los que están metidos en las iglesias)
abandonen sus sistemas babilonios y que participen en la ciudadanía
de la Comunidad de Israel y de Sión como herederos iguales de
Yahweh. Los israelitas salvos no deben de participar en la bancarrota
común del paganismo disfrazado de apariencia religiosa. Si vamos a
ser verdaderamente uno en El, será preciso dejar atrás una gran
parte de la doctrina incorrecta, la controversia por la controversia
es pecado, en cambio la controversia por amor a la verdad es un
mandato divino. ¡Ojalá que Yahweh nos capacite para afligir a los
cómodos y para consolar a los afligidos!
En Shemot 12:10 Yahweh
mandó que todos los que comiesen el cordero de la Pesaj con
sinceridad no dejasen absolutamente nada de él. Estaban prohibidas
las sobras. El cordero tenía que ser o bien comido o quemado y tanto
lo uno como lo otro eran actos de consumición. Como sombra de las
cosas venideras, Yahweh había pedido que la plenitud del Cordero (la
Palabra) fuese dispensado por Sus seguidores.